martes, 22 de noviembre de 2016

La invulnerabilidad de Bale



Cuando hago la fotografía por la mañana, el hombre con la carretilla que camina justo por debajo de la imagen de Bale de la tienda de Adidas (podría haber sido la de Marcelo o la de James) es solo una coincidencia. Unas horas más tarde, en el momento en el que Bale se retira lesionado en el minuto 57 del partido contra el Sporting de Lisboa, la coincidencia se convierte en una señal.

Le puede llevar dos meses recuperarse de la operación de la luxación traumática de los tendones de su tobillo derecho. Durante todo ese tiempo pasaré por delante de la tienda para ver los vídeos que pasan de él en varias pantallas. No jugará contra el Barça, ni contra el Dortmund, ni lo hará en Japón, pero yo podré detenerme para disfrutar de esas imágenes en las que, elevado por la estética de la publicidad, se encuentra en esa zona a la que nunca podrán llegan los tacos de Coates.