Una toalla al hombro : Indudablemente ésta es una playa familiar. En un paseo
por la zona que recorremos para ir al mar me encuentro con un biberón colocado
sobre el tope del muro que rodea un aparcamiento. Es normal que, con lo
cargados que vamos a la arena, algo se caiga en el trayecto. Un accidente que
puede interpretarse de forma casual o como el resultado de una motivación más
profunda. O no tan profunda: lo que más se añora de la playa es ese tiempo en
el que a vida pesaba lo que esa toalla que se llevaba al hombro y que se podía extender en cualquier
sitio. Todos valían.
No hay comentarios:
Publicar un comentario