Una catedral laica

En el barrio, la referencia es Mercadona. Los sábados por la mañana, los tres pisos del aparcamiento están llenos. Cuesta encontrar un hueco. La gente baja en los ascensores con carritos repletos de bolsas y esa sensación de orgullo que debemos arrastrar desde la era del Neandhertal, cuando podíamos volver a la caverna con alimento para toda la familia.

Es nuestra catedral laica.

Si Dios está en todas partes, tiene que estar también, sin duda, junto a este pasillo con diez clases diferentes de geles :

-Gel para pieles atópicas : 2,95 euros (500 Ml)
-Gel de ducha relajante : 1,20 euros (500 Ml)
-Gel de ducha oliva : 1,50 euros(750 Ml)
-Gel natural de glicerina : 1,50 euros (750 Ml)
-Gel dermoprotector : 1,35 (750 Ml)
-Gel para pieles sensibles : 1,35 (750 Ml)
-Gel regenerante : 1,35 euros (750 Ml)
-Gel de ducha termanl : 1,35 euros (750 Ml)
-Gel de crema hidratante : 1,50 euros (Ml)
-Gel nutritivo urea : 1,60 euros (Ml

Pienso en todo el trabajo que hay detrás de este pasillo repleto de geles. Pienso en este mismo pasillo sin artículos, en este centro sin mercancías, sin gente, sin luces, sin movimiento. Me imagino este local desierto y me pregunto dónde se notaría más la ausencia de ese Dios que está en todas partes : en este local vacío o en una iglesia vacía.